LCNI
& MBA José Luis Lecona Roldán
Founding & Managing Partner
FX Global Management LLC
Investment
Club
Resumen Semanal de Mercados del 23 al 27
de Agosto 2021.
¿Por qué es importante considerar tanto el Análisis Fundamental como el Análisis Técnico al momento de conformar un Portafolio de Inversión?
Dando
seguimiento a los temas objeto de análisis abordados en entregas previas de nuestro
Resumen Semanal de Mercados, en esta ocasión pondremos particular atención en
la importancia que tiene considerar tanto el Análisis Fundamental como el
Análisis Técnico al momento de conformar un Portafolio de Inversión, pues
mientras que el Análisis Fundamental se enfoca en los aspectos de tipo Cuantitativo,
el Análisis Técnico lo hace con los aspectos de tipo Cualitativo, es decir, mientras
que el 1° nos permite conocer -por ejemplo- la salud financiera de las Emisoras
que conformarán nuestros Portafolios de Inversión, el 2° nos permite conocer la
percepción que de lo anterior tenga el público inversionista internacional
-institucional y/o individual-, lo cual es importante ante un escenario en el
que el público inversionista individual está cada vez más y mejor informado,
además de facultado para hacerse cargo de girar las órdenes de compra/venta por
medios electrónicos de los diferentes instrumentos financieros que conformarán sus
Portafolios de Inversión, destacando como parte integral de la toma de decisiones
del público inversionista en general si las Emisoras objeto de consideración
cumplen o no con los criterios que para ellos son importantes como los
criterios ESG -por sus siglas en Inglés-, los cuales como hemos señalado con anterioridad
hacen referencia a la responsabilidad tanto ecológica como social y desde luego
a la existencia y el adecuado funcionamiento del gobierno corporativo correspondiente.
Con
base en lo anterior, retomaremos algunos de los aspectos señalados en la 2ª Edición
del libro “El Manejo de Capitales en el Siglo XXI” relacionados con el tema.
Así las cosas, recordemos que existen principalmente
dos tipos de Analistas en los Mercados Financieros, los Analistas Fundamentales
y los Analistas Técnicos, los cuáles a su vez, suelen auxiliarse de ambas
metodologías, es decir, un Analista Fundamental es susceptible de considerar el
Análisis Técnico y viceversa, sin que lo anterior signifique que alguno de ellos
tenga la verdad absoluta.
En este contexto, para el caso de los
Mercados Accionarios, los Fundamentalistas consideran qué mediante el análisis
profundo de las operaciones de las Emisoras, su liquidez, pago de dividendos, reportes
de utilidad, ventas -entre otros aspectos-, se pueden valorar sus Acciones, de
modo que su destreza se basa en encontrar Emisoras Subvaluadas o Sobrevaluadas
para invertir/negociar con ellas mientras su valor se corrige.
Por su parte, los Analistas Técnicos suelen
ignorar todo lo anterior apoyándose principalmente en la información proporcionada
por las cotizaciones/precios de los instrumentos financieros objeto de
consideración como las Acciones, pues de acuerdo con su teoría, la cotización/precio
de la Acción ya refleja las expectativas, noticias, opiniones, rumores,
volatilidad y demás aspectos Fundamentales.
En este orden de ideas, su teoría tiene por
objeto extraer patrones de comportamiento de las cotizaciones/precios
manifiestos en las Gráficas (Charts) para desarrollar sistemas mecánicos de
compra/venta de Acciones que produzcan ganancias de capital, concentrando su
atención en la cotización/precio y volumen de operación asociados a dicho instrumento
financiero.
No obstante lo anterior, debemos
reconocer que el Análisis Fundamental incluye el estudio de las diferentes variables
tanto Microeconómicas como Macroeconómicas del Mercado en general, de cada
Sector o Industria y de cada Emisora en particular para el caso de los Mercados
Accionarios, de modo que estas variables tienen una relación por demás estrecha
entre cada Mercado (Accionario, Bonos, Derivados, Divisas) y/o instrumento financiero
en particular, poniendo de manifiesto que la actividad Financiera Bursátil no
está aislada del dinamismo económico-comercial mundial, sino que forma parte
integral del mismo.
Por lo cual, es importante estar enterados de las noticias y reportes en materia económica, política y
social en el entorno local, regional y global, ya que los grandes capitales no
permanecen indefinidamente en un solo lugar, por el contrario, se mantienen en
constante rotación.
En este orden de ideas, como
inversionistas individuales debemos reconocer nuestras posibilidades y limitaciones,
pues si bien en la actualidad estamos en condición de negociar con las mejores cotizaciones/precios
posibles, también es cierto que no tenemos el potencial para propiciar algún
movimiento trascendental en el Mercado, por lo que es de vital importancia
negociar en favor de la tendencia del Mercado, la cual será determinada por el
sentimiento de los diferentes participantes, sentimiento que podremos
monitorear mediante el estudio riguroso del aspecto Fundamental correspondiente.
Por su parte, el Análisis Técnico incluye
un pronóstico del Mercado basado en análisis estadísticos y patrones de
comportamiento de las cotizaciones/precios, a diferencia del Análisis
Fundamental que estudia entre otros factores, temas económicos y geopolíticos y
la repercusión que lo anterior pueda tener en un determinado Sector, Industria
y/o Emisora en particular para el caso de los Mercados Accionarios.
Por lo anterior, es necesario hacer una
clasificación de los diferentes instrumentos financieros susceptibles de consideración,
pues aun cuando podemos identificar semejanzas entre éstos, existen variables
particulares en cada caso.
En razón de lo cual, es necesario
responder una serie de preguntas antes de diversificar nuestros Portafolios de
Inversión, toda vez que, en la actualidad es posible acceder a la mayor parte
de instrumentos financieros a través del común denominador de Intermediarios Financieros,
la diferencia estriba en el vehículo seleccionado para tal efecto, pues esto
puede significar costos y retenciones impositivas innecesarias.
¿Qué?
Renta Fija (Bonos Corporativos, Bonos
Gubernamentales, Certificados de Depósito, etc.).
Renta Variable (Acciones, American Depositary Receipts -ADR´s-, Exchange Traded Funds -ETF´s-, Real Estate Investment Trust -REIT´s-, etc.).
¿Cómo?
Porcentajes de inversión/negociación en
cada instrumento financiero, es decir, la composición, diversificación y
balance de la cartera.
¿Cuándo?
El momento idóneo para adquirir dichos instrumentos financieros, aprovechando los ajustes temporales a la baja en las cotizaciones/precios y/o esperando
la colocación de nuevas y atractivas Emisiones.
¿Dónde?
La Institución Financiera adecuada para
llevar a cabo la estrategia de inversión/negociación de manera segura y
eficiente, considerando para tal efecto que en la actualidad existen
principalmente en los Estados Unidos y Europa una extensa variedad de
Instituciones Financieras dedicadas a proporcionar acceso electrónico a los
diferentes Mercados, sin embargo, no todas ellas cuentan con la infraestructura
necesaria para cubrir los requerimientos del público inversionista, pues en
algunos casos, se trata de Intermediarios Financieros especializados en un
Mercado en particular, lo cual podría resultar contraproducente al momento de
administrar un Portafolio de Inversión que requiere diversificación, por lo que
es importante seleccionar al Intermediario Financiero que cuente con la plataformas
de negociación electrónica que nos permita operar en los diferentes Mercados,
no obstante nuestra actividad preponderante se concentre en uno en particular,
pues recordemos que cada Mercado tiene características particulares aun cuando
tienen en común optimizar la administración de los activos financieros con la
finalidad de obtener un beneficio económico, lo cual es posible llevar a cabo
de forma individual si nuestra restricción presupuestaria lo permite o bien de
forma colectiva -por ejemplo- a través de un Investment Club que estando
debidamente habilitado para el ejercicio de sus funciones y siendo compatible
con nuestros intereses consideremos pertinente, conscientes de que un
Investment Club no tiene clientes sino inversionistas asociados con intereses
en común, quienes se reservan el derecho de diversificar discrecionalmente el
valor acumulado de sus aportaciones de capital, distribuyendo las relaciones
costo-beneficio y riesgo-recompensa asociadas acorde con sus aportaciones de
capital individuales.
¿Qué aspectos Fundamentales debemos considerar
al momento de conformar un Portafolio de Inversión?
Con este antecedente en mente, destaquemos
algunos aspectos importantes que deberán ser consultados antes de invertir/negociar
en los Mercados Accionarios, particularmente si pretendemos comprometernos en
el mediano y/o largo plazo con una determinada Emisora, pues si bien es posible
beneficiarnos de los movimientos de corto plazo, también es cierto que los
grandes capitales se generan en el mediano y largo plazo.
Así las cosas y conscientes de que en la
actividad Financiera Bursátil el elemento humano juega un papel muy importante,
empecemos por considerar que el miedo, la ambición y la ansiedad, son
sentimientos que tienden a afectar nuestra toma de decisiones a veces con
resultados un tanto adversos, ejemplo de lo anterior es que existen
inversionistas que deciden tomar posición Long, es decir invertir o negociar a
la alza el Dow Jones Industrial Average después de una espectacular alza de 500
Puntos; ¿Por qué? ¿Qué cambió? ¿Acaso es que el Dow Jones Industrial Average no
estaba conformado por buenas Emisoras antes de esta alza? El Índice no cambió,
lo que sí cambio fueron las percepciones y expectativas del público
inversionista ante el mismo. ¿Qué nos muestra esto? Sencillamente que la gran
mayoría de inversionistas -particularmente los individuales- involucran
sentimientos y no fundamentos en sus inversiones, de lo contrario dichos
inversionistas habrían visto las mismas o mejores oportunidades en el Dow Jones
Industrial Average una semana antes de la espectacular alza de 500 Puntos.
Es comprensible que muchas veces nos
dejemos llevar por impulsos e instintos, pero nuestra meta debe ser eliminar la
mayor parte del factor emotivo en nuestras inversiones/negociaciones y la mejor
manera de lograrlo, sin que ello signifique que sea fácil, es trazándonos metas
claras y parámetros de inversión/negociación definidos que nos limiten a actuar
de manera prevista ante circunstancias imprevistas, para lo cual, es necesario diseñar
estrategias de inversión/negociación que se logran con educación, experiencia y
por ende tiempo para aprender a filtrar la información que recibimos todos los
días, pues no porque el amigo de un amigo se hizo rico con alguna Acción, significa
que debemos salir corriendo a comprarla.
La idea es aprender a seleccionar la
información de valor del resto de los “rumores y chismes” que oímos día tras
día, por ejemplo, una de las mejores maneras de aislar todos los factores
externos a nuestras inversiones es estableciendo estrategias de largo plazo, de
esta manera, no nos quitará el sueño que el Dow Jones Industrial Average suba o
baje en una semana, si en el largo plazo -históricamente- ha subido, lo cual no
significa que exista una sola forma de filtrar la información, pero para
empezar es una buena opción, seguido de métodos basados en porcentajes mínimos
de ganancias o pérdidas que nos indiquen cuándo comprar/vender Acciones de una determinada
Emisora y/o métodos más avanzados basados en un análisis de Estados Financieros
y/o Razones Financieras que nos indiquen si una Emisora está Sobrevaluada, o si
tiene un futuro bien fundamentado o no.
Con la finalidad de entender el concepto
que se pretende transmitir, utilizaremos algunos ejemplos, aunque de tipo
coloquial, de uso común por diferentes instituciones de enseñanza en materia de
inversión/negociación de Mercados Financieros por medios electrónicos.
Supongamos que un día nos levantamos con
un terrible dolor en una pierna o un brazo, al llegar al médico y luego de un
par de preguntas, lo más seguro es que nos tomen una radiografía para valorar
si hay algo mal que no se pueda ver a simple vista, una vez que el médico
examine las radiografías nos podrá dar un diagnóstico de la condición de
nuestra pierna o brazo.
Pues
bien, así como podríamos decir que una Gráfica es un Electrocardiograma de los
diferentes instrumentos financieros (Acción, Bono, Derivado, Divisa), también
podríamos decir que un Estado Financiero es la Radiografía de una Emisora y los
Analistas que mencionamos serían los médicos de nuestro ejemplo, con base en lo
anterior, podemos asumir que los Estados Financieros son nada más y nada menos
que una herramienta que se usa para presentar información acerca de la “Salud”
Financiera de una Emisora.
Aunque a simple vista parezcan un mensaje
en clave secreta, en realidad no son tan complicados como parecen y la
información que contienen es un arma muy valiosa para cualquier inversionista,
misma que es pública y actualmente está disponible en diferentes Portales de
Internet de forma gratuita.
En este orden de ideas, los Estados
Financieros de cualquier Emisora constan de tres partes:
1.
Balance General (Balance Sheet)
2.
Estado de Ganancias y Pérdidas (Income
Statement)
3.
Estado de Flujo de Efectivo (Cash Flow
Statement)
El entender lo que representa el Balance
General de una Emisora es crucial para determinar si presenta un verdadero
valor para sus Accionistas, es decir, si la Emisora está en condición de
generar los rendimientos que el Accionista, en este caso nosotros, está
esperando, partiendo de la premisa que la cotización/precio de la Acción en sí
misma no tiene mayor significado, por lo que es indispensable conocer los
pormenores de la Emisora y evitar con ello el error de concentrar nuestra atención
únicamente en las utilidades de la misma sin analizar el Balance General y el
Estado de Flujo de Efectivo, pues recordemos que sólo el Balance General nos
puede decir si la Emisora es estable, o lo que es lo mismo, si tiene suficiente
dinero para seguir fundando bases para su crecimiento o si de lo contrario, la Emisora
necesita una inyección de capital para continuar con su funcionamiento, mismo
que puede conseguir a través de la Emisión de Deuda o poniendo a disposición
del Mercado más Acciones.
Tan
importante como lo anterior, es preguntarnos quién es quién al momento de
seleccionar una determinada Emisora para incluirla en nuestro Portafolio de
Inversión, en vez de concentrar nuestra atención únicamente en la Razón Financiera
P/E (Price/Earnings Per Share) o Relación Precio/Utilidades, pues recordemos
que las decisiones de inversión requieren mucho más que saber qué ha hecho y/o
está haciendo una determinada Emisora.
Esta relación Precio/Utilidad es muy
sencilla de calcular, basta con dividir el precio de la Acción entre las utilidades
por Acción de la Emisora, datos que pueden obtenerse del Estado de Ganancias y
Pérdidas.
Por ejemplo, supongamos que las Acciones
de la Emisora “A” valen $ 20.00 USD cada una y sus utilidades por Acción
anuales son de $ 2.00 USD, derivado de lo anterior, podemos calcular que la
Razón P/E para la Emisora “A” es de 10 a 1, normalmente leído como 10.
En otras palabras, se puede decir que la
Acción se está vendiendo a 10 veces sus utilidades, si la Acción subiera de
precio hasta $ 40.00 USD, la Razón P/E sería igual a 20, o lo que es lo mismo,
se estaría vendiendo a 20 veces sus utilidades.
Obviamente, esta Razón por sí sola no nos
dice mucho, por tanto, es necesario compararla con las Razones P/E de años
anteriores de la misma Emisora y con otras Razones P/E de otras Emisoras que
compitan dentro de la misma Industria.
Por lo general, una Razón P/E muy alta
indica que los inversionistas tienen mucha confianza en la habilidad de la Emisora
para producir mayores ganancias en el futuro, desafortunadamente, muchos inversionistas utilizan esta Razón Financiera por sí sola aislada de otros indicadores
y de otras Emisoras de la misma Industria, incluso, podemos encontrarnos con
alguien que diga “Yo no compro Acciones con P/E mayores de 40", así mismo,
podemos escuchar decir que una Acción está Sobrevaluada por tener un P/E de 65.
¿Sobrevaluado comparado con qué?
Los P/E tienen que ser puestos en un
contexto que les dé sentido, de tal forma que podamos tener un punto
comparativo objetivo, pues decir que no estamos interesados en Acciones con P/E
iguales o mayores a 50 sería tanto como decir que en el Polo Norte hace mucho
frío aun cuando la temperatura ambiente se encontrara sobre 0°, lo cual
objetivamente hablando podría ser una temperatura “cálida” para dicho lugar
después de haber estado en -10° o -20°.
Como “regla general”, queremos ver que una
Acción correctamente valuada, tenga una Razón Financiera P/E igual al
porcentaje de crecimiento por año de sus utilidades por Acción (EPS).
Analicemos el siguiente ejemplo:
Tenemos que analizar dos Emisoras para decidir en cuál de las dos invertir un porcentaje de nuestro patrimonio.
La Primera, Emisora “A”
Precio: $ 20.00 USD
Utilidades por Acción: $ 2.00 USD
P/E: 10
La Segunda, Emisora “B”
Precio: $ 10.00 USD
Utilidades por Acción: $ 2.00 USD
P/E: 5
A simple vista, pareciera que la Emisora “B”
es la mejor decisión, ya que tiene los mismos EPS que la Emisora “A”, sin
embargo, se está vendiendo por la mitad de precio, pues bien, esta apreciación
es incorrecta.
Concentremos nuestra atención en el
ejemplo anterior, en donde tenemos que analizar dos Emisoras para decidir en
cuál de las dos invertir un porcentaje de nuestro patrimonio.
La Primera, Emisora “A”
Precio: $ 20.00 USD
Utilidades por Acción: $2.00 USD
P/E: 10
La Segunda, Emisora “B”
Precio: $ 10.00 USD
Utilidades por Acción: $ 2.00 USD
P/E:
5
Con
esta información en mente, recordemos que lo más importante para todo
inversionista es saber hacia dónde se dirige la Emisora objeto de inversión, de
modo que no debe importarnos tanto que la Emisora “B” haya sido el líder en su
ramo durante cierto periodo de tiempo si poco más tarde llegó la Emisora “A” y
con su excelente estructura y concepto innovador se convirtió en líder de la
Industria, lo cual no significa que no sea importante tener un buen
conocimiento de la historia de la Emisora al igual que hacer un buen análisis
de su presente, el punto es que no podemos detenernos ahí, de la misma manera
que no podemos basar nuestras decisiones de inversión simplemente en el precio
o utilidades de una Emisora.
Para ejemplificar lo anterior, supongamos
ahora que la Emisora “A” está cercana a expandirse con varias oficinas en
diferentes países y está cerrando negociaciones importantes, todo esto sin
tener que tomar un centavo de deuda y con efectivo suficiente para recompensar
a sus fieles clientes.
Por otra parte, la Emisora “B” continúa
teniendo dificultades para competir con la Emisora “A” en cada uno de los
nichos de mercado donde trabaja, además su estructura de efectivo está de mal
en peor, está endeudada y se rumora que su presidente está malgastando el
dinero de sus Accionistas, en cuyo caso, está claro que una vez informados al
respecto, no pensaríamos dos veces en donde invertir nuestro dinero.
Con el ejemplo anterior, acabamos de ver
lo fácil que es caer en el error de basar nuestras inversiones en la Razón Financiera
P/E únicamente. Así mismo, vimos en una pequeña comparación, el porqué, la Emisora
“A” es la mejor de las dos Emisoras y por consiguiente vale más.
En este caso pudimos ver que el P/E de la
Emisora “A” es el doble que el P/E de la Emisora “B”, por deducción, la Razón Financiera
P/E generalmente refleja las expectativas de crecimiento que tiene el Mercado
(Analistas, Inversionistas, Casas de Corretaje, etc.) respecto a la Emisora en
cuestión.
Gracias a las perspectivas de crecimiento
y el excelente futuro que se le presenta a la Emisora “A”, no es sorprendente
entonces que tenga una Razón Financiera P/E dos veces mayor que la de su
decadente competencia la Emisora “B”, basado en lo anterior, sería interesante
echar un vistazo a la manera de calcular la Tasa de Crecimiento de cada Emisora.
Cabe destacar que podemos encontrar Tasas
de Crecimiento para diferentes aspectos, por ejemplo, base de clientes, ganancias,
ventas, etc., sin embargo, por ahora lo que nos interesa es la Tasa de
Crecimiento de las utilidades (Earnings) de cada Emisora.
La fórmula es:
Tasa de Crecimiento Esperada =
(Utilidades Esperadas para el Próximo Año - Utilidades Actuales)*100/Utilidades
Actuales
En esta fórmula estamos dependiendo
directamente de las expectativas que existan para nuestra Emisora y por eso aplicamos
utilidades esperadas para el próximo año, dicho lo cual, supongamos entonces
que el más selecto grupo de Analistas concluye que esperan que las utilidades
de la Emisora “A” para el próximo año sean de $ 3.00 USD, ya sabemos que
nuestras utilidades actuales son de $ 2.00 USD.
Así que; ¿De cuánto será nuestra Tasa de Crecimiento
esperada?
Tasa de Crecimiento Esperada = ($ 3.00
USD - $ 2.00 USD)*100 /$ 2.00 USD = 50%
Por otra parte, tenemos la desafortunada
Emisora “B”, de la cual se espera presente utilidades de $ 1.00 USD el próximo
año debido a que su negocio continúa en decadencia. Recordemos que sus
utilidades actuales son de $ 2.00 USD, así podemos calcular su Tasa de
Crecimiento esperada.
Tasa de Crecimiento Esperada = ($ 1.00
USD - $ 2.00 USD)*100 / $ 2.00 USD = - 50%
Lo cual quiere decir que el Mercado tiene
muy buenas expectativas de la Emisora “A” por lo que su futuro es bastante
promisorio, mientras que para la Emisora “B”, las cosas no pintan nada bien,
pues en lugar de crecer y ganar, sus expectativas están reduciéndose y por ende
perdiendo, nada agradable encontrarse en esa posición.
Así las cosas, hemos visto lo valiosa que
puede ser esta nueva fórmula, sin ella, las dos Emisoras se veían casi iguales,
de hecho, a simple vista la Emisora “B” parecía la mejor alternativa de
inversión.
Afortunadamente, no nos limitamos con
aceptar el simple precio o utilidades de la Emisora para tomar una decisión,
por el contrario, nos atrevimos a investigar un poco el futuro de las dos Emisoras,
sus planes y expectativas con lo que obtuvimos una prueba contundente de qué Emisora
es la mejor.
En conclusión, no es lo mismo “Caro” que
“Costoso”, de modo que no necesariamente la mejor adquisición es la más barata,
de acuerdo con la afirmación anterior consideremos “Caro” un modesto vehículo
tipo Sedán cuyo valor promedio sea de $ 10,000.00 USD, el cual por mucho equipo
que tenga no podrá valer mucho más que eso aun cuando el equipo adicional
instalado lo haga lucir diferente y llamativo, así las cosas, pretender que
dicho vehículo incremente su valor en un 50% o 100% lo clasificaría como
“Caro”.
En tanto que “Costoso” sería un Clásico
Deportivo cuyo valor promedio supere los $ 50,000.00 USD, el cual aún en su
versión más elemental, no deja de ser un Clásico Deportivo y por consiguiente
mejor cotizado, clasificándolo entonces como “Costoso”.
Resumiendo lo anterior podemos establecer
que aun cuando tengamos un Sedán por demás equipado nunca podrá ser comparado
con un Clásico Deportivo independientemente de su versión y modelo, pues este
último siempre será un mejor auto y como tal su valor será superior, poniendo
de manifiesto que “Caro” es todo aquello que no vale lo que cuesta, mientras
que “Costoso” es todo aquello que aun estando reservado para unos cuantos, si vale lo que cuesta.
Moraleja; “No todo lo que brilla es Oro”.
Claro está que el ejemplo anterior se ha
concretado en dos Emisoras, al tiempo que sólo se analizó un año en cada caso,
para que el análisis sea más profundo y valioso es recomendable comparar varias
Emisoras de la misma Industria y analizar más de un año con cada una, ejemplo de lo anterior
es el Resumen Ejecutivo sobre la tesis de Herbalife, Ltd. (NYSE: HLF)
presentada por Pershing Square Capital Management, L.P.,
el 20 de Diciembre de 2012 titulado; “Who Wants to be a Millionaire?”, en el cual contrasta la Emisora Herbalife, Ltd., con
otras Emisoras pertenecientes al mismo Sector/Industria con la finalidad de
demostrar que Herbalife, Ltd., es un esquema piramidal, argumentando una serie
de anomalías en su modelo de negocio tales como fundamentar el éxito del mismo en
el reclutamiento de nuevos distribuidores independientes y no así en la venta
de sus productos, los cuáles comparados con los productos de sus competidores
son apenas unos cuantos, al grado que si se quisieran exhibir la totalidad de
productos de la competencia de Herbalife, Ltd., en una sala de juntas no
cabrían, mientras que para exhibir la totalidad de productos de Herbalife, Ltd.,
al ser tan pocos bastaría con ponerlos sobre un escritorio.
Fuente: Pershing Square Capital Management, L.P.
https://factsaboutherbalife.com/
Fuente: Pershing Square Capital Management, L.P.
https://factsaboutherbalife.com/
Consultado: 27/08/2021
Desde luego, en el presente Resumen Semanal de Mercados hemos hecho referencia al caso de Herbalife, Ltd., publicado por Pershing Square Capital Management, L.P., por ser del dominio público, lo cual no significa que el objetivo de FX Global Management LLC sea promover la inversión en una determinada Emisora, mucho menos despotricar en contra de estas, sino poner de manifiesto los aspectos que como inversionistas debemos considerar al momento de conformar nuestros Portafolios de Inversión, lo cual es oportuno señalar, también es aplicable para el caso de aquellos interesados en incursionar en un determinado modelo de negocio -cualquiera que este sea-, por lo que corresponde a cada cual tomarse el tiempo para hacer las indagatorias correspondientes y con base en su libre albedrío, proceder en consecuencia con su toma de decisiones.
LCNI & MBA José Luis Lecona Roldán
Founding
& Managing Partner of FX Global Management LLC
Investment
Club Member of National Association of Investors Corporation –NAIC-
Autor del libro “El Manejo de Capitales
en el Siglo XXI” -1ª y 2ª Edición-
Coautor del libro “Inteligencia
Competitiva; Práctica y Aplicada”
Nota: Los comentarios emitidos en el
presente tienen como propósito mantener informados a los grupos de interés de
FX Global Management LLC entendidos como inversionistas asociados y sus
respectivas cadenas de valor de la conformación de las estrategias de
inversión, diversificación y cobertura financiera por dicha entidad
administradas, por lo que no deben considerarse como una recomendación de
inversión, diversificación o cobertura financiera dirigida al público en
general, poniendo de manifiesto que es responsabilidad de cada cual la toma de
decisiones en cuanto al manejo de sus activos financieros.